lunes, 1 de febrero de 2010

AFRONTAR LOS PROBLEMAS CON CALMA


Si nos hallamos ante una gran presión emocional, lo mejor es no hacer nada. Espera un poco. El momento más adecuado para hablar o tomar decisiones es cuando uno se encuentra tranquilo.
Debemos tratar de descubrir el aspecto positivo de todas las circunstancias por negativas que parezcan.
Aprender a controlar nuestra mente para manejar las situaciones que se nos presentan pero además extraer alegía y paz de las mismas vicisitudes. Para lograrlo es necesario reconocer las emociones negativas en el momento mismo de su nacimiento. Una fuerte energía positiva puede poner fin a cualquier situación por más enojosa o negativa que ésta sea.
Hacerse invencible ante los obstáculos (enemigos, enfermedades, fuerzas dañinas)como resultado del aprendizaje espiritual no significa que vamos a apartarlos o que no van a volver a presentarse. Significa que esos obstáculos no se interponddrán como tales en la búsqueda del camino de la felicidad y la iluminación.
Podemos hacernos amigos de nuestros problemas. Recordemos aquello de "a lo que resistes, persiste".
Es posible que necesitemos relajarnos y dejar de aferrarnos al Yo, cuidar más de nosotros mismos y de nuestras verdaderas necesidades, o modificar algún aspecto de nuestro comportamiento.
Debemos tener presente que una idea o una inspiración positiva se convierte en alimento para la mente como la comida sana para el cuerpo.
Cuando valoramos los aspectos positivos de una situación nuestra mente se fortalece.Cuando aprendemos a reírnos de nosotros mismos y de los problemas nos liberamos. Cuando aprendemos a disfrutar y a no ver los problemas como algo negativo, nos volvemos más positivos respecto a todo. Pensar positivamente es un hábito maravilloso que debemos desarrollar, porque proporciona bienestar y felicidad a nuestra vida

No hay comentarios:

Publicar un comentario