EL PERDÓN

EL PERDÓN

No hay sanación interior posible sin perdón.

El perdón es el primer paso hacia la sanación. El perdón no significa necesariamente exonerar de culpa a quien nos lastimó, significa liberarme interiormente de ese dolor para ya no cargarlo más conmigo.

El perdón no es olvido, es recordar sin que duela, sin que lastime.

Dijo Mark Twain " Perdón es la fragancia que la violeta suelta cuando se levanta el zapato que la aplasta", y es así que liberar la fragancia de nuestro corazón nos alivia y nos permite seguir adelante, en paz con nosotros mismos y con quien nos ha herido.

Y así como perdonamos, debemos saber pedir perdón, cuando lo hacemos dejamos que nuestra alma se libere de esa pesada carga y le damos alas nuevamente.

Al perdonar nuestro corazón se expande, y se abre nuevamente al amor, y tal vez si es posible, a la reconciliación.

El perdón nos trae al presente, deja atrás las memorias dolorosas y nos permite empezar de nuevo con el corazón abierto.

El perdón libera nuestras almas para que vuelvan a brillar, para que saque sus dones y virtudes que nadie nos puede quitar nunca.

Recupera tu felicidad a través del perdón, él te conducirá de nuevo hacia tu corazón y hacia el amor.